Uno de mis mentores, me contó la historia de un viejo líder que refería como al envejecer tras más de cuarenta años de servicio en su área vocacional, había dejado de preocuparse por lo que había hecho o dejado de hacer, para enfocarse más bien en que se había transformado.
En el liderazgo saludable, la actitud correcta es transformacional y eso empieza por el autoliderazgo. El verdadero legado de un líder no es cuanta información transmite, cuanto conocimiento crea y agrega a otros, sino su propio caminar en integridad.
Aprendimos la semana pasada que la primera clave para el autoliderazgo es “apuntar al blanco correcto”. Esto es enfocarme en lo importante, no en las añadiduras.
Hoy deseo compartir con usted la segunda clave en este proceso actitudinal para desarrollar un autoliderazgo saludable y productivo.
2. Corre la carrera correcta
Todos tenemos
delante de nosotros una carrera diferente para cada uno de nosotros. Usted no
puede ni debe correr la carrera de otro, solo puede y debe correr la tuya.
Si usted corre
la carrera equivocada, terminará en la línea de llegada incorrecta. El líder y
autor Wayne Cordeiro cuenta, en una de sus obras recientes, la historia real de
un corredor de maratón de las Olimpiadas quien, aunque claramente dejó a todos
atrás, fue descalificado de la competencia por la medalla. ¿Por qué? Porque en
su fatiga y confusión, había cruzado la meta final equivocada.
A veces
vivimos vidas sin contentamiento porque estamos corriendo hacia la meta
equivocada. Ponemos un esfuerzo enorme, pero no estamos invirtiendo nuestro
tiempo y recursos donde debemos invertirlos. En cambio, tenemos nuestros
propios deseos e intentamos usar a otros para ayudarnos a llegar donde queremos
ir.
Como invocando al genio de la lámpara, tratamos de frotar a Dios, a nuestros guías, mentores y amigos para que respondan conforme a nuestros deseos. No queremos esperar consejo, así que pedimos que avalen lo que queremos, nos convenga o no.
Intenta hacer
la siguiente oración. Cambiará su perspectiva y le ayudará a mantenerte en
camino y terminar bien:
Señor, aquí
está mi vida. Usa mi vida para Tus propósitos y Tus deseos. Señor, ven a vivir
Tu vida a través de mí. Lo que sea que tengo, cualquier capacidad que pueda
poseer, cualesquiera que sean mis habilidades y aptitudes, finanzas o tesoros, Señor,
las pongo a Tus pies. ¿Cómo puedes usarlas? Instrúyeme, para que pueda ser un
mayordomo fiel y usa mi vida para Tus propósitos. Ya sea que tenga mucho o
poco, estaré satisfecho porque sé que estás usando mi vida para Tus propósitos.
Ven, Señor, vive Tu vida a través de mí.
¡En lugar de
decirle a Dios lo que harás por Él, pídele que haga Su trabajo a través suyo!
En lugar de decirle a Dios cómo planeas vivir para Él, pídale que le muestre
Sus planes para su vida. ¡Haciendo esto, podrá tocar Su poder para complementar
Sus planes a Su manera!
No hay mayor
satisfacción que experimentar el propósito de Dios a través de nuestra alma.
«Porque yo sé
los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de
paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis». (Jeremías
29.11)
Hasta la próxima entrega
Juan Carlos Flores Zúñiga
COACHING EN TRANSICIONES.

Dios te bendiga mucho Juan Carlos. Gracias por bendecirnos con esta importante serie sobre autoliderazgo en tu blog de coaching en transiciones.
ResponderEliminarDe lujo hno. Flores.
ResponderEliminarExcelente artículo. Así es en verdad.
Bendiciones, que bendición por recibir este tesoro de mucha ayuda en estos tiempos. Dios te bendiga muchísimo más pastor
ResponderEliminarbuenas noche pastor juan,
ResponderEliminarmi pregunta: usted dice,, que Dios prepara una carrera diferente para cada uno de nosotros.no puedes correr la carrera de otro y debes correr la tuya,, si mi pastor esta entrenando a lideres y el tiene su propia carrera y quiere que hiciéramos lo mismo,, que tenemos que hacer, yo no estoy viviendo mi propia espiritualidad en este caso ¿ que debo hacer?
Hola Ariel. Cuando eres parte de una congregación y parte de su equipo de liderazgo debe abrazar la visión que Dios tiene para la iglesia. Si no estas de acuerdo con la visión debes manifestarlo pero aceptar que no podras ser un miembro funcional de esa vision. Esto probablemente ocurra cuando Dios ya te este revelando una vision para ti en otro lugar y momento.
ResponderEliminarHola hno Juan saludos desde Tuxpan Ver, como siempre oportunos los mensajes, Dios siga bendiciendo su vida y si engrandeciendo la fundación, un abrazo.
ResponderEliminarPastor Juan Carlos un abrazo muy grande, gracias por todo lo que nos da Dios a traves suyo, esta enseñanza era lo que necesitaba hoy, muchas bendiciones
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